Instrumentación:
Flauta en Do, Oboe, Clarinete Sib, Fagot
Trompa en Fa (fuera del escenario), Trompeta en Do (fuera del escenario), Trombón Tenor (fuera del escenario)
Percusión (1 intérprete): Plato suspendido, Tam-tam, Timbal (29”), Bombo, Cortina, 2 Tom-Tons, 3 Temple Blocks, Vibráfono (Do2-Do5), Percusión Pequeña (Triángulo, Collar de semillas, Cepillo)
Arpa
Piano
Violín I, Violín II, Viola, Violonchelo, Contrabajo
Duración: c.a. 6:30 minutos
Año de composición: 2009 – 2010
Estreno: 16 de mayo de 2010, Festival ENSEMS, Teatro Talia (Valencia)
Grup Instrumental de Valencia
Joan Cerveró (Director)
Encargo: Grup Instrumental de Valencia con motivo del II Seminario Permanente de Composición, bajo la tutela del compositor José María Sánchez Verdú
Notas al programa:
Esta obra está inspirada en la lectura de dos textos: por un lado el relato del “Mito de la caverna” de Platón y por otro, el “Elogio de la sombra” del japonés Junichiro Tonizaki. En ambos textos un elemento común las une: la Sombra.
La palabra “Numen” significa “Presencia”. En la antigüedad hacía referencia a la presencia divina en los cultos religiosos.
Partiendo de estas premisas, en la obra el concepto de sombra va a tener un protagonismo principal, pues va a determinar desde los materiales a emplear, la estructura de la pieza, la disposición espacial del ensemble en el escenario, así como, la asociación de diferentes combinaciones instrumentales durante toda la obra.
Dividida en cuatro secciones, la pieza discurre en un continuo flujo de materiales que crean diversas atmósferas y estratos, en los cuales el trabajo tímbrico y el uso de nuevas técnicas instrumentales van a provocar que el ensemble sea un ente orgánico en continua evolución.
“La Belleza pierde su existencia si se le suprimen los efectos de sombras”
(El Elogio de la Sombra, 1933)
Junichiro Tanizaki (1896-1965)